Para mirar

Muchas tramas de películas giran entorno a las cartas que envía un familiar a otro, haciéndose pasar por alguien, por ejemplo, las películas Good Bye Lenin y Mi querido Frankie. Cartas de París (Bélgica- Francia, 2003) de la directora y co-guionista Julie Bertuccelli supera ampliamente a las otras.
Tres generaciones de mujeres que representan a tres generaciones de la ex Unión Soviética. La anciana pro Stalin, la hija desalucinada de aquel régimen y la nieta escéptica, que se siente estancada en su país.
Al morir el hijo de la anciana, la hija y nieta,que viven con ella, deciden escribir las cartas del hijo fallecido para evitar el sufrimiento. La anciana demuestra su fortaleza y carácter, a pesar del frágil aspecto. Se roba la película y las risas, los guiños, todo. La abuela (Esther Gorintin) es el valor de Cartas de París.