En Punta del Este la IMM y la Liga buscan fondos para restaurar obras escultóricas como la de "los dedos"
En la península de Punta del Este, la mano gigante de mampostería entre las dunas de arena se convirtió, en los últimos años, en la foto obligada de los visitantes del balneario. Tal vez por ello cuenta con cierto mantenimiento como la pintura anti-graffiti. El resto de las esculturas que conforman el Parque de las Américas no presenta la misma suerte: hormigón cascado, basamentos quebrados, pintura levantada, chapa doblada, además de los graffiti con declaraciones de amor o manifestaciones de odio. Tampoco cuenta con iluminación ni cartelería.
El Parque se inaugura durante el gobierno militar, el 2 de febrero de 1982, fecha de Nuestra Señora de la Candelaria, patrona de Punta del Este. Así, el escultor chileno Mario Irrazábal consagra su obra de La mano, conocida popularmente como "Los dedos", en un intento por manifestar la presencia del hombre en la naturaleza, mientras que el paraguayo Hernán Guggiardi que crea, en chapa de acero, un pájaro caído para ilustrar la contaminación de la naturaleza, tolera que no se restaure el soporte de la obra desde el temporal de agosto de 2005, por lo que ahora se encuentra tirada en el piso.
Desde la Dirección General de Cultura de la Intendencia Municipal de Maldonado (IMM), el profesor Gabriel Di Leone reconoce la importancia de la restauración de las esculturas y sostiene que está trabajando en un convenio entre la IMM y la Liga de Fomento de Punta del Este para su reparación y mantenimiento. "Como no está previsto un presupuesto para el mantenimiento de ese espacio, estamos tratando de conseguir los fondos con la Liga", afirma.
La IMM, que autoriza el alquiler de la explanada de la Liga de Fomento para las exposiciones automotrices, busca que las ganancias del alquiler de esta temporada se destinen al mantenimiento de las esculturas de la Península. Para ello se intenta extender el Parque de las Américas de modo que incorpore la escultura de Atchugarry, ubicada al lado de la Liga, en la parada 1 de la Mansa. El presidente de la Liga de Fomento entiende que el estado actual de las esculturas deteriora la imagen de la península, y expresa el interés por rescatar este patrimonio urbano que confiere categoría al balneario. Mientras tanto, las esculturas siguen abandonadas en una zona de clima agresivo y autoridades negligentes.
El Parque se inaugura durante el gobierno militar, el 2 de febrero de 1982, fecha de Nuestra Señora de la Candelaria, patrona de Punta del Este. Así, el escultor chileno Mario Irrazábal consagra su obra de La mano, conocida popularmente como "Los dedos", en un intento por manifestar la presencia del hombre en la naturaleza, mientras que el paraguayo Hernán Guggiardi que crea, en chapa de acero, un pájaro caído para ilustrar la contaminación de la naturaleza, tolera que no se restaure el soporte de la obra desde el temporal de agosto de 2005, por lo que ahora se encuentra tirada en el piso.
Desde la Dirección General de Cultura de la Intendencia Municipal de Maldonado (IMM), el profesor Gabriel Di Leone reconoce la importancia de la restauración de las esculturas y sostiene que está trabajando en un convenio entre la IMM y la Liga de Fomento de Punta del Este para su reparación y mantenimiento. "Como no está previsto un presupuesto para el mantenimiento de ese espacio, estamos tratando de conseguir los fondos con la Liga", afirma.
La IMM, que autoriza el alquiler de la explanada de la Liga de Fomento para las exposiciones automotrices, busca que las ganancias del alquiler de esta temporada se destinen al mantenimiento de las esculturas de la Península. Para ello se intenta extender el Parque de las Américas de modo que incorpore la escultura de Atchugarry, ubicada al lado de la Liga, en la parada 1 de la Mansa. El presidente de la Liga de Fomento entiende que el estado actual de las esculturas deteriora la imagen de la península, y expresa el interés por rescatar este patrimonio urbano que confiere categoría al balneario. Mientras tanto, las esculturas siguen abandonadas en una zona de clima agresivo y autoridades negligentes.
Publicado en el suplemento Qué Pasa de El País el sábado 8 de agosto de 2009
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